¿Qué es la detección del estrés ambiental?
El control de estrés ambiental (ESS) es una fase crucial en el proceso de fabricación de sistemas electrónicos, sobre todo en la industria de las placas de circuito impreso. Consiste en someter los sistemas electrónicos a una serie de pruebas rigurosas que simulan diversas condiciones ambientales, como temperaturas extremas, vibraciones, polvo, humedad, lluvia y caídas físicas. El objetivo principal de la ESS es detectar posibles fallos o puntos débiles en el diseño de los sistemas electrónicos, garantizando que los productos finales sean fiables y capaces de funcionar sin fallos ni averías en condiciones de funcionamiento reales.
Durante el ESS, los sistemas electrónicos se someten a múltiples pruebas que los exponen a las condiciones ambientales especificadas. Estas pruebas están diseñadas para llevar los sistemas a sus límites y descubrir cualquier defecto o debilidad de diseño que pueda provocar fallos o mal funcionamiento sobre el terreno. Si un producto no supera alguna de estas pruebas, indica que hay fallos en su diseño, y el equipo de diseño puede entonces hacer las correcciones necesarias para mejorar su fiabilidad y rendimiento.
La implantación de ESS durante el proceso de fabricación es crucial porque permite detectar a tiempo fallos y puntos débiles en el producto. Al identificar y rectificar estos problemas durante la fase de ESS, las empresas pueden ahorrar costes significativos a largo plazo. Corregir los defectos de diseño durante la ESS evita la necesidad de costosas retiradas de productos y posibles daños a la reputación de la empresa.